Hace unas dos semanas regrésé de Iquitos. La verdad, es que ha sido una experiencia increible. Los paisajes, los lugares que he visitado, la cultura "indígena", toda la biodiversidad que he visto, la cantidad de ríos con sus fabulosos meandros, la inmensidad de bosques que, vistos desde el cielo, se extienden hasta el horizonte y más allá, entre muchas otras cosas, que ya os contaré detalladamente en otra ocasión.
Cierto es, que al igual que esta mancha verde se extendía hasta dónde alcanzaba mi vista, lo mismo ocurría con columnas de humo. Desgraciadamente, estas indicaban la presencia de quemas de selva primaria para convertirlas en terrenos agrícola; los cuales, en 2-3 años, pasarán a convertirse en zonas degradadas, en las que muy díficilmente se restaurará el ecosistema original. Debido a las fuertes e intensas precipitaciones, todos los nutrientes y el suelo mismo, son arrastrados hacía lo
Mi aventura comenzó en Iquitos. Como de costumbre, no tenía nada planeado, fui a la aventura. Una vez en el "motocarro-mototaxi", me dirigí a la plaza de armas y allí comencé a buscar algún hotelito "seguro" y no muy caro. Una vez encontrado, todavía me quedaba la tarea más difícil, encontrar alguna agencia de viajes que ya tuviera programada alguna salida a la selva, cuanto más lejos e internado mejor, y de larga duración. Después de preguntar en varios lugares, finalmente encontré un buen chollo.A 130 km de Iquitos, en el Río Yanayacu (agua negra) en plena selva virgen, y con tan solo dos comunidades pr
Durante ese tiempo me hospedé en el lodge que podéis ver en la foto. Todo es
Entre las actividades que realicé, las más impactante de todas fue el de hacer supervivencia en la selva. Íbamos con una mosquitera y un par de plásticos, para protegernos de la lluvia. Además, también llevábamos algo de comida, pero básicamente comimos peces pescados rudimentariamiente del río con algo de arroz hervido. Nunca me había imaginado el poder comerme aquellos peces, que desde pequeño, he estado criando en mis acuarios. Chupaalgas, Oscar, Pirañas y otro tipo de cíclidos y barbos constituían parte del menú diario. Durante la supervivencia, también comimos hongos silvestres, corazón de palmera, larvas "sabrosas" con sabor a coco, una rana gigante llamada "hualo" y bebimos agua de la liana uña de gato. También estuvimos buscando caimanes por la
noche...pero, afortunadamente para ellos, todos se encontraban en el medio del río, siendo imposible capturarlos y cocinarlos. Por supuesto también vimos monos, una serpiente de coral, loros, algunos guacamayos y tucanes entre muchos otros animales.
En fin, como no quiero aburriros más, simplemente deciros, que francamente ha sido impresionante, y si no fuera por la cantidad de insectos que hay (que a duras penas te permiten dormir por la noche, tanto por el ruído como por sus picaduras y por notar su presencia), podría decirse que seguro que se asemeja al paraíso. En esta ocasión, la visité durante la época seca, pe
A mi que no me esperen en la selva pero me encanta que me lo cuenten...
ResponderEliminarPues seguro que te encantaría!
ResponderEliminarEl otro día, subiendo a Yanacancha (REPANA de Miraflores, perdí el camino, y me dediqué a subir por la quebrada y el barranco, hasta arriba del todo (4200 m), que es en dónde estaban haciendo la faena. Esa excursión si te hubiera gustado
Nen, sense comentaris!!!
ResponderEliminarEva!!
ResponderEliminarTodavía espero tu visita o tu postal, eh?
O al final váis las 3 a China?